Cuando comenzamos con nuestro primer negocio es muy probable tengamos un montón de dudas sobre los procedimientos y trámites que debemos afrontar cada vez que importamos o exportamos nuestros productos.
Por suerte, en IFL nos encargamos de todo el papelerío, pero,
¿Qué consideraciones debemos tomar antes de importar?
Según la Economipedia “Importar” se define como:
“ … básicamente todo bien y/o servicio legítimo que un país (llamado ‘importador’) compra a otro país (exportador) para su utilización.”
Economipedia . Definición de «Impotar»
Teniendo claro esto, hay varios aspectos esenciales antes de embarcarnos en este rubro y es muy importante tenerlos presentes para asegurarnos un transporte adecuado, un almacenamiento seguro y un producto de calidad en las manos de nuestro cliente final:
1 – Transporte:
Un traslado de las mercancías seguro, rentable y ágil es el camino ideal. Debe cumplir con todos los estándares de seguridad, contemplar las condiciones y conocer el producto que transporta.
Es importante también que pueda organizar la mercancía de una manera rentable y así evitar gastos innecesarios, esto ayudará a un proceso logístico más ágil y organizado.
2 – Almacenamiento:
Cuando nos encontramos en negocios de importación o exportación, el punto del almacenamiento es esencial. Ya que vamos a traer altas cantidades de carga las cuales deben acumularse en estos almacenes antes de despacharse y así evitar cargos de transporte mucho más altos (como también un consumo de los servicios de traslado más ecológico y consciente).
El almacenamiento debe cumplir con las necesidades del producto ante todo. Para ello debemos conocer sus condiciones de preservación (si es un producto fresco requiere cadena de frío o en el caso de un modelo tecnológico la humedad no debe estar presente), si no hay cuidado por este punto podemos enfrentarnos a pérdidas enormes.
3 – Producto:
Cuando trasladamos mercancía y la exponemos a viajes o despachos de días (inclusive semanas), es importante tener un plan organizado y sistemático que nos permita crear un modelo cíclico que se repita cada vez que importamos algo. Es decir, organizar aquello que traemos o enviamos de una manera práctica, que no genere atrasos y estandarizar este proceso para ejecutarlo cada vez que sea necesario. A modo de ejemplo hay productos tecnológicos que requieren trámites adicionales en aduana y en ocasiones generan demoras innecesarias en otros productos si éstos viajan en el mismo embarque.
Tomando estas consideraciones podremos realizar nuestras importaciones sin ningún problema.
O si prefieres olvidarte de todo y recibir tu mercadería en la puerta de tu local, puedes escribirnos y nos encargaremos de todo.
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